18 feb 2009

Educar o adoctrinar... en familia

Las mayorías, y las instituciones democráticas, también se equivocan. Lo hacen, por supuesto, cuando trastornadas por el miedo o el fanatismo se lanzan a la guerra, el recorte de las libertades o la erosión de las instituciones. Pero también cuando, embebidas de entusiasmo liberal, democrático o igualitario olvidan las intersecciones y los conflictos de valores -libertad, democracia, igualdad- para proclamar uno de ellos como absoluto. El neoliberalismo doctrinario sacrifica la igualdad y supedita la democracia a la libertad (sobre todo de comercio, dicho sea). Atenas sacrificó la libertad a la democracia. El comunismo sacrificó libertad y democracia a la igualdad. La Sociedad de Naciones proclamó el derecho de los pueblos a la autodeterminación olvidando que, en medio mundo, tales pueblos ya no existían como tales y sólo podrían ser reconstruidos y reafirmados a costa de los individuos.

En nuestro ámbito, una de esas solemnes barbaridades o sandeces (o ambas a la vez) es el llamado derecho fundamental de los padres a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.

¿Qué derecho es ése? Sencillamente, el que convierte a los padres en propietarios absolutos de sus hijos en contra de ellos mismos y de la sociedad sin de la cual serían menos que primates. Porque lo que se proclama no es el derecho a formar a sus hijos en unas creencias pero permitiendo y asegurando, al mismo tiempo, que aprendan que viven en una sociedad con otras y que se preparen para, al paso de su maduración, aceptarlas, cambiarlas, rechazarlas u olvidarlas. Se persigue que no conozcan otra cosa, que ignoren a la sociedad que a lo largo de la historia los ha hecho humanos y hoy les hace libres y que no puedan elegir por sí mismos. En definitiva, lavarles el cerebro en nombre de las propias creencias que, mira por dónde, casi siempre son también las de la santamadreiglesia.

1 comentario:

  1. Saludos. Me parece equivocada su interpretación de la enseñanza de la religión. Si hay una enseñanza cerrada al conocimiento humanista y profundamente ideológica es la Educación para la ciudadanía, n bloque temático cuyo único objeto es adoctrinar. Un saludo.

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