8 dic 2008

Se buscan ideas

No me convence, me inquieta y, en definitiva, me decepciona y me desagrada el lema Otra escuela es posible. Creo que es posible, y necesaria, pero también que es lo mismo que no decir nada y que para eso se hace. Es un lema holgazán, una perogrullada que evita decir cuál escuela es ésa posible (al menos de entrada, lo cual puede ser peor: ¿se acuerdan de aquel de entrada, nada?).

Sé que se dice otra escuela porque ya se decía otro mundo, pero esa trasposición tampoco me convence. Ya el lema otro mundo es posible resulta problemático y oportunista, aunque puede entenderse donde nació y para lo que nació, el Foro Social Mundial, frente a la autocomplacencia ciega de Davos. Pero el mundo escolar no es el de los desamparados frente al capital global, por más que la retórica gremial y funcionarial se empeñe, sino el de un colectivo privilegiado y con mucho poder grupal y personal, que no siempre ejerce como debe.

Prueba de esa banalidad es que sirva de título a dos libros muy distintos: S. Joshua (París, Textuel, 2003), típico bodrio monocorde sobre la ola de neoliberalismo que nos invade (antes decían de materialismo), y R. Feito (Madrid, Siglo XXI, 2006), buen conjunto de ensayos que el primero podría atribuir a dicha ola (más una monografía de la Rev. Univ. de Formación del Profesorado, nº 48, mismo título, que recoge media docena de diversas experiencias de centro y aula, es decir, de todo un poco, como su nombre indica).

Un implícito del lema, si se toma en serio, es que cualquier otra escuela estaría (estuvo o estará) mejor, lo cual atrae amistades peligrosas. Tiene demasiado de catch-all, i.e., de mecanismo para aglutinar a todos los descontentos, pero, salvo frente al mal absoluto, que ya no habita entre nosotros, esto es un riesgo. Al fin y al cabo, la escuela no ha empeorado sino mejorado con el tiempo y no sólo es mejorable sino también manifiestamente empeorable, y algunos están en ello.

10 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo en que debemos mostrar más entusiasmo y fuerza en destacar lo que de bueno tiene, y es mucho, la Escuela actual. Potenciar sus cualidades, el que sea inclusiva, la labor imaginativa e ilusionada de los nuevos maestros de infantil y primaria que se esfuerzan en mejorar sus experiencias y en transmitir su ilusión a los que les preceden.

    También los padres necesitamos y poco de ilusión -que no de engaño- y de formación. Vayamos de la mano conscientes de nuestras limitaciones, pero también de nuestras habilidades.

    Un placer encontrar el blog de Mariano.

    Saludos.

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  2. Bien, acuerdo sobre la banalidad de la frase. También es de reconocer que la escuela de ahora es mejor que la de "antes", aunque las dos cumplan la misma función.
    La situación actual demuestra cuan poco puede mejorar y todo lo que puede perder si no se la democratiza urgentemente.
    Ocurre que, tanto techo como piso, están delimitados por la sociedad a la que pertenece la escuela. Difícilmente mejore más de lo que lo logró si no se saca da encima a los sindicatos y a los burócratas. De la misma manera no puede caer más bajo de lo que la sociedad industrial requiere.
    Solo mejorará si el gobierno de la escuela es ejercido pos el público.

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  3. Por los suburvios de Bs As anda circulando una consigna elaborada por padres y trabajadores que dice: "La escuela es nuestra. Por una escuela digna para todos"

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  4. No es solo una cuestion de entusiasmo, sino de una labor de investigacion accion promovida desde las administraciones. Si la escuela tiene que cumplir una funcion social debe adecuarse a las necesidades de esa sociedad por poner solo un ejemplo:

    si los padres tienen que trabajar la escuela debera sustituirlos ejerciendo no solo como ente instructor sino como educador.
    Servicios de guarderia, comedores y actividades extraescolares.

    si queremos formar personas con habitos fisicos saludables e inquietudes culturales varias deberiamos revisar el planteamiento actual de estas actividades como parte del curriculum formal y trabajarlas como actividades optativas de horario de tarde dando a elegir entre diversas practicas deporivas y culturales.

    Si queremos que los chicos aprendan idiomas deberemos reducir el numero de los mismos y aumentar el tiempo dedicado a cada uno, si el segundo idioma se establece por criterios logicos este deberia ser el arabe o el chino y no el frances o el aleman, el segundo idioma debe ser de libre eleccion en horario de tarde y abierto a cualquier propuesta que reuna un numero minimo de demanda, o acaso un grupo de padres chinos deben optar por el aleman antes que por su idioma natal.

    si queremos que las fammilias ahorren en costes podriamos pensar en facilitar el carnet de conducir en los centros de secundaria y la universidad. O asegurarnos que al menos antes de que tengan la opcion de realizar su formacion profesional gratis reconocida y de calidad, alejada de los actuales cursos de entretenimiento para desempleados y trabajadores.

    si queremos que los chicos lean y escriban correctamente quizas debieramos eliminar las clases de lengua durante la primaria y centrarnos en la redaccion y la lectura.

    pero sobre todo si queremos que aprendan deberemos asegurarnos que las personas que les enseñan saben de lo que hablan y muestran un minimo entusiasmo por la materia.

    Las necesidades de los alumnos chocan contra un sistema y estoy de acuerdo con el profesor Enguita que cuando se propone un cambio hay que aseguarse sus efectos colaterales sobre todo en lo de no excluir a nadie, al igual que se cambio el griego y el latin cuando dejaron de tener sentido, se precisa urgentemente el cambio de otros muchos aspectos de una organizacion educativa y un curriculum completamente desfasados e inutiles. El problema de fondo es que el cambio supone la eliminacion o transformacion de los puestos de trabajo de muchas personas, lo importante no es cambiar las carretas por los coches sino asegurrarse de reciclar y mejorar las condiciones de los carreteros para que aprendan y acepten renunciar y cambiar su carreta por un coche. Las personas tienen miedo a plantear la irracionalidad de su trabajo aunque sean plenamente conscientes por miedo a perderlo, pero es que no corresponde a ellas hacerlo es el estado el que debe asumir esa responsabilidad impulsando el cambio, relfexionando sobre su necesidad publicamente y facilitandoles una alternativa a su situacion laboral segura y digna.

    Me apena ver a los jovenes manifestarse como borregos contra Bolonia y que nadie sea capaz de hacerlo contra el curriculum escolar y la discriminacion educativa que ellos sufren cada dia. Todo para que un grupo de espabilados vividores hagan carrerra politica a su costa desde los sindicatos de estudiantes, y si no que se lo pregunten a toda esa banda de incompetentes y trepas politicos surguidos de la transicion, y es que no basta con el entusiasmo y las buenas ideas hace falta saber sobre como llevarlas a buen termino.

    Si les sirve para algo les contare una anecdota estando en el instituto un dia llego un amigo y lider estudiantil proponiento la autonomia para canarias, realizamos una manifestacion inmediatamente por la causa, al dia siguiente habia cambiado de opinion y la manifestacion fue por la independencia, años mas tarde me confeso que en verdad no tenia ni idea de que suponian una u otra alternativa, la moraleja es que no hay nada mas peligroso que ir de abanderado de una causa que se desconoce.

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  5. no me puedo reprimir lo siento...
    Pensaba que eras de izquierdas


    Una universitaria cursaba el segundo semestre de sus estudios.
    Como es común en los universitarios, pensaba que era de izquierdas y estaba a favor de la distribución de la riqueza (que aún ella no había logrado).

    Tenía vergüenza de que su padre fuera de derechas y se opusiera a los programas socialistas.

    Sus honorables y objetivos profesores le habían asegurado que la de su papá era una filosofía equivocada.

    Por lo anterior, un día se decidió a enfrentarse a su padre. Le habló del materialismo histórico y la dialéctica de Marx, tratando de hacerle ver cuán equivocado estaba al defender un sistema tan injusto. En eso, como queriendo hablar de otra cosa, su padre le preguntó:

    - ¿Cómo van las clases?

    - Van bien respondió la estudiante. Tengo promedio de notas de 9. Me cuesta, no tengo vida social y duermo poco, pero lo logro.

    El padre pregunta:

    - Y a tu amiga Soledad, ¿cómo le ha ido?

    La hija respondió muy segura de sí misma:

    - Muy mal, Soledad tiene 4 de promedio. Se pasa todo el tiempo en los centros comerciales y anda de fiesta en fiesta, no estudia y muchas veces ni siquiera asiste a clase. Va a perder el año académico.

    El padre, mirándola a los ojos, le respondió:

    - Entonces busca al Decano y pídele que le transfiera 2,5 de tus 9 puntos a ella, para que ambas tengáis 6,5; esta sería una buena y equitativa distribución de notas.

    Ella, indignada, le gritó:

    - ¿¡Por qué!? He tenido que trabajar muy duro para lograr mi promedio, mientras que Soledad no estudia y se dedica a disfrutar de la vida. ¡No le voy a regalar mi trabajo!

    Su padre la abrazó cariñosamente y le dijo:

    ¡¡¡BIENVENIDA A LA DERECHA!!!

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  6. Pero si lo anterior ya ha pasado........

    lunes 6 de octubre de 2008
    el catrecillo de Procusto
    Una cama o lecho de Procusto es un estándar arbitrario para el que se fuerza una conformidad, y un símbolo de conformismo y uniformización. Procusto ofrecía posada al viajero solitario y lo invitaba a acostarse en una cama de hierro en la que debía encajar quieras que no. Y no se andaba con chiquitas. En el blog de mi amigo Eduardo Robredo tenemos hoy una entrada sobre "La izquierda y la naturaleza humana". No hay desperdicio ni en su post ni en los comentarios que lleva de cola. Uno de sus links remite a otra entrada suya titulada "Todos iguales" en la que comenta una película basada en un relato de Kurt Vonnegutt, 2081. Dice: "Finalmente todos seremos iguales (trailer) presenta una distopía política en la que todos son obligados a ser iguales, parafraseando a Rousseau. Por la vía "constitucional" los fuertes son obligados a llevar pesos en la ropa, los guapos a portar máscaras y los inteligentes a no sacar ventaja de su cerebro superior. El gobierno se convierte así en una instancia suprema contra la selección natural".

    Hay muchos motivos para pensar que el desastre de la educación en España también tiene relación con la incapacidad de aceptar que no todos los niños son iguales. Bien, quiero decir que no son iguales "genéticamente" hablando, que socioeconómicamente hablando sí que lo está, de aceptado. Un ejemplo casero, pura anécdota: este mediodía mi prima me ha dicho que a su hija de 12 años, mi sobrina, en unas pruebas de natación de su colegio le quitaron un punto "por ser la más alta". La niña había ganado la competición...con malas artes (naturales). Así que se la penalizó. Y en relación con la cuestión de la asunción de las diferencias socioeconómicas, otra anédota y con el mismo origen. Mi sobrina estaba en la franja alta de las notas de inglés de su curso. Con sus pequeñas orejitas tuvo que oír cómo los profesores afirmaban ante el pleno de la clase que los que habían sacado buenos resultados y estaban en esta sospechosa categoría eran los niños que habían tenido clases extras de inglés o vacaciones en campamentos de verano. Ella no había tenido nada de eso, sólo cabeza, estudio y tesón, cualidades caídas en desgracia y que se aconseja disimular.

    No lo está pasando bien y, para consolarla y para que se vaya haciendo a la idea de esa cosa de la naturaleza humana, le voy a contar lo de Procusto, los lechos y el resentimiento del profe resabiado y mediocre.

    Publicado por Mujer-Pez EL lunes, octubre 06, 2008

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  7. Anónimo13:58

    Articulo de Azua en "El Periodico".

    F. de Azúa: 'La letra ni con sangre entra'

    La ocultación de lo que está sucediendo en la enseñanza en España (la peor de Europa) se diría pactada por los funcionarios políticos y los sindicatos.

    13/12/2008 El Periódico
    Felix de Azúa







    Un amigo que tiene el infortunio de ser profesor de instituto advirtió la hoja de informes internos sobre la mesa del director. Cada día, un profesor de guardia anota lo que en la jerga burocrática suele llamarse "incidencias". Estos informes son secretos y ni siquiera sabemos si los realizan todos los centros de enseñanza media. El informe era tan escalofriante que, sin pensarlo dos veces, sacó una fotocopia y me la envió para que me percatase de la vida normal de un instituto en la España actual. Parecía un serial de adolescentes. Otra prueba de que la tele es el único centro pedagógico del país.

    Un muchacho abofetea a una chica y cuando el profesor le sujeta por el brazo otros chavales gritan "¡Ahora, ahora!" y el profesor recibe una tunda de patadas. Una profesora expulsa de clase a un alumno y su compinche grita: "¡Dale una hostia, que no puede hacerte nada!". Hay escenas de sexo en los retretes, de violencia con padres de alumnos, porros por todas partes, amenazas, humillaciones, hurtos, y así durante tres folios. Es desolador porque ese instituto ni está en un barrio duro, ni es particularmente difícil.

    Llamo a mi amigo y le digo que sería interesante publicar el informe tal cual está, sin añadir ni una coma, y que le pida permiso al colega que lo firma. Por supuesto, borrando los nombres y ocultando la ciudad del instituto. Así lo hace mi amigo, pero la respuesta es un grito de espanto. "¡Tú quieres que me maten! Como se enteren de que he divulgado ese informe, me trituran". ¿Quién? Sus propios jefes.

    La ocultación de lo que está sucediendo en la enseñanza (la peor de Europa) se diría pactada por los funcionarios políticos y los sindicatos. Se sabe que solo en Cataluña el año pasado 163 profesores denunciaron agresiones de alumnos (ANP). ¡Cómo debió de ser cada uno de esos ataques para ponerlos en manos de nuestra adorable Administración! ¡Y cuántos deben de producirse para que aflore esa punta de iceberg!

    Si así se conducen con los profesores, ¿cómo serán las relaciones entre los alumnos? Pues puro fascismo: terror y silencio

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  8. No se puede negar que el ocultismo no es un buen metodo para mejorar la situacion educativa,y muchos somoslos que creemos que hay que airear y sacar a la vista los problemas como un primer paso para solucionarlos,pero lo que no se puede hacer es plantear el problema como algo congenito,estoy de acuerdo en que la letra ni con sangre entra y es que cuando lo hacia con sangre salia con la misma velocidad con la que entraba, ya que los malos recuerdos es algo que tendemos olvidar. La violencia es consecuente con el modelo de sociedad y en una sociedad exclusiva es logico que se genere,silos modelos de referencia que les damos a los jovenes son irracionales no podemos pretender que estos tengan un corportamiento racional,o acaso son los adolescentes los que maltratan a su pareja, los que disfrutan insultando al equipo contrario o viendo como le clavan espadas a un toro,los que se pavonean de escaquearse del trabajo y cargarselo al compañero, los que predican una moral que no siguen.Cierto que los profesores no tienen por que convertirse en blanco de descarga del resentimiento de los jovenesy par ello es necesario establecer medidas que ayuden a proteger y valorar la labor docente,pero lo que no se puede hacer es un discurso neonazi proponiendo la exclusion de estos jovenes del sistema escolar aludiendo al disparate xenofobo de la incapacidad intelectual y eso va por Tineo. NO SIEMPRE EL HACER LAS COSAS QUE TE MANDAN ES UNA MUESTRA DE SABIDURIA Y COMPETENCIA;aprender un monton de cosas sin significado lo unico que demuestra es una falta de criterio; tendencia al adoctrinamiento y la sumision. Lo que necesitan los jovenes son oportunidades para expresar su potencial (Sternberg) y unos valores menos hipocritas fundamentados en la atencion (Noodings) y no crear un guantanamo gigante para jovenes incorformistas y disruptivos

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  9. Anónimo13:54

    Ernesto Mascarell said…

    NO SIEMPRE EL HACER LAS COSAS QUE TE MANDAN ES UNA MUESTRA DE SABIDURIA Y COMPETENCIA; aprender un monton de cosas sin significado lo unico que demuestra es una falta de criterio; tendencia al adoctrinamiento y la sumision. Lo que necesitan los jovenes son oportunidades para expresar su potencial (Sternberg) y unos valores menos hipocritas fundamentados en la atencion (Noodings) y no crear un guantanamo gigante para jovenes incorformistas y disruptivos.

    Impresionante definición de la “Escuela Pública” en el día de hoy, me quito el sombrero ante un diagnostico tan certero, solo cambiaría lo de Guantánamo por GULAG, se ciñe más a lo expuesto.

    Coda: La semana pasada, en el IES al que va mi hijo, dieron las notas, la de Sociales suspendió a uno de los niños, el cual se fue insultando a la profesora y tarareando “la internacional” puño en alto y gritando “muera el fascismo”, para finalizar con un “voy a por ti”. La profesora informó a la clase que, como medida de presión, iba a llamar a la madre para comentarle el incidente, a lo que la clase le dijo: Por favor no!!! Que la madre es una pesada!!!.
    (Supongo que idéntica reacción tendría el claustro si, en vez de “La internacional” hubiera sido el “cara al sol”, no dudo de la ecuanimidad de los mismos).
    Otro sí: no cuento el desparrame y las juergas que se montan con EpC, dignos de camarote de Hermanos Marx.

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  10. Anónimo16:46

    Soy profesor de Secundaria en un centro público rural en Galicia. El artículo de Azúa publicado un poco más arriba me sorprende. En primer lugar, no existe, al menos en mi centro, eso que se denomina "hoja de informes internos"; no existe ni en mi centro ni en ningún otro del que tenga noticia. Dudo mucho que por cada guardia un profesor tenga tiempo (o simplemente, ganas) de elaborar tal informe. Incluso cuando se detectan conductas extraordinariamente malas se informa de manera oral al responsable (Jefe de Estudios, u otro cargo directivo en su ausencia). Por otro lado, el conjunto hechos descritos en el artículo ("escenas de sexo en los retretes, de violencia con padres de alumnos, porros por todas partes, amenazas, humillaciones, hurtos, y así durante tres folios") me parece cuanto menos poco verosímil, por no decir increíble e inventado. ¡Cuanta desinformación tiene la sociedad acerca de lo que sucede en un Instituto! Lo peor de todo es que si de verdad se conocieran algunas prácticas corrientes en los centros escolares el escándalo tal vez no sería menor... pero en fin, ya puestos a escandalizar, que se escandalice con algo que sea cierto.

    Recientemente han salido en la prensa gallega una serie de noticias sobre la venta de drogas en los colegios (según las cuales "el 46,6% de los alumnos cree que es sencillo conseguir sustancias ilegales en su centro escolar", de donde se deduce inmediatamente que los colegios gallegos son lugares donde se trafica con drogas con la misma normalidad con que los niños van al baño o los profesores se suenan la nariz; fuente: El 46,6% de los alumnos cree que es sencillo conseguir sustancias ilegales en su centro escolar). Es una afirmación tan estúpida que pasaría por una broma de no haber causado gran nerviosismo entre los padres: cualquiera que trabaje en un centro de enseñanza convencional sabe que eso tiene la misma probabilidad de ocurrir en un centro de enseñanza que en una comisaría. La verdad, la pura verdad, es que un traficante de drogas al por mayor en un instituto no tarda ni 24 horas en ser localizado, básicamente porque ese es el tiempo que tarda en llegar el aviso a dirección por parte de cualquiera que tenga la más mínima sospecha de que está ocurriendo de manera regular, sea padre, alumno o profesor. Por suerte (o desgracia) los centros escolares son lugares intensamente vigilados, auténticos panópticos donde todo el mundo vigila a todo el mundo. Lo que no quita que, puntualmente, suceda.

    A ver si nos dejamos de sensacionalismos...

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